Vacunas COVID-19 en Guatemala: dosis, refuerzos y lugares para vacunación
La vacunación contra el COVID-19 sigue siendo una herramienta clave para protegernos. En este artículo encontrarás información actualizada sobre las vacunas disponibles en Guatemala, a quiénes van dirigidas, cuándo aplicarlas y por qué son importantes para tu salud, la de tu familia y tu comunidad.
¿Cómo funcionan las vacunas?
Las vacunas contienen partes debilitadas o inactivas de un organismo en particular (antígeno) que desencadena una respuesta inmunitaria dentro del cuerpo. Las vacunas más nuevas contienen el modelo para producir antígenos en lugar del antígeno mismo. Independientemente de si la vacuna se compone del antígeno mismo o del plan para que el cuerpo produzca el antígeno, esta versión debilitada no causará la enfermedad en la persona que recibe la vacuna, pero hará que su sistema inmunitario responda tanto como sea posible. tendría en su primera reacción al patógeno real.
Ingredientes de las vacunas
En las vacunas de hoy en día se usan solo los ingredientes necesarios para que sean lo más seguras y eficaces posible, no contienen ningún ingrediente tóxico.
Cada ingrediente de las vacunas tiene una finalidad específica, como proporcionar inmunidad (protección), mantener la seguridad y durabilidad de la vacuna.
Algunos ingredientes que pueden mencionarse son:
¿Las vacunas contienen ingredientes tóxicos?
En las vacunas de hoy en día se usan solo los ingredientes necesarios para que sean lo más seguras y eficaces posible, no contienen ningún ingrediente tóxico.
Algunas personas se preocupan por ciertos ingredientes debido a su nombre químico o porque en otras circunstancias (dosis altas, formas distintas o vías diferentes) pueden ser tóxicos. Sin embargo, la toxicidad depende de la dosis y del contexto.
Las vacunas no son tóxicas y sus beneficios en la prevención de enfermedades graves superan ampliamente cualquier riesgo. Los ingredientes que contienen cumplen funciones específicas y están presentes en cantidades muy pequeñas, seguras y reguladas.
¿Las vacunas traen metales?
Algunas vacunas pueden contener trazas de metales como el aluminio, pero no representan un riesgo para la salud y su uso ha sido seguro durante décadas.
Las sales de aluminio se añaden a ciertas vacunas (como hepatitis A, hepatitis B, VPH y dTpa) para mejorar la respuesta del sistema inmunológico. Según la FDA, su uso es seguro y ha sido ampliamente estudiado por más de 60 años.
Sin embargo, las vacunas contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna no contienen aluminio ni otros metales como el mercurio.
Tampoco contienen componentes que generen magnetismo o campos electromagnéticos. A pesar de los rumores en redes sociales, las vacunas no hacen que se peguen objetos al cuerpo ni contienen ingredientes capaces de causar ese efecto.
En algunos casos, vacunas multidosis contra la influenza pueden contener timerosal, un conservante que incluye etilmercurio, muy diferente del mercurio tóxico. Este componente ha demostrado ser seguro, y solo puede causar reacciones menores como enrojecimiento o hinchazón.
¿Por qué es seguro vacunarse?
Vacunarse es seguro porque las vacunas pasan por pruebas rigurosas antes de ser aprobadas y su uso es vigilado continuamente por autoridades de salud como la OMS, la FDA o los CDC.
Los ingredientes que contienen han sido estudiados por décadas y se usan en cantidades muy pequeñas que no representan riesgo.
Gracias a las vacunas, se han prevenido millones de enfermedades graves y muertes en todo el mundo.
¿Qué es una autorización de uso de emergencia?
Una Autorización de Uso de Emergencia (EUA, por sus siglas en inglés), es un mecanismo para facilitar la disponibilidad y el uso de medicamentos, incluidas las vacunas, durante las emergencias de salud pública, como la actual pandemia causada por el COVID-19.
Instituciones regulatorias como la FDA puede permitir el uso de productos médicos en una emergencia para diagnosticar, tratar o prevenir enfermedades o afecciones graves o que pongan en peligro la vida, cuando se hayan cumplido ciertos criterios regulatorios, entre ellos que no existan alternativas adecuadas, aprobadas y disponibles (como otros medicamentos, otras vacunas, entre otros).
Teniendo en cuenta esto, los fabricantes deciden cuando presentar una solicitud de EUA a la FDA. Una vez presentada, la FDA evaluará la solicitud de EUA y determinará si cumple con los criterios regulatorios, tomando en cuenta toda la evidencia científica sobre la vacuna antes de aprobar su uso.
¿Por qué las vacunas tienen diferentes porcentajes de efectividad?
La efectividad de una vacuna puede variar por varios factores.
Cada vacuna está desarrollada con tecnologías distintas, por fabricantes diferentes, y está diseñada para actuar de manera específica frente a un virus que puede cambiar con el tiempo (por ejemplo, con nuevas variantes como Delta u Ómicron).
Además, la efectividad se mide en diferentes contextos, como:
¿Diferencia entre eficacia y efectividad?
La eficacia de una vacuna se calcula en los ensayos clínicos, en circunstancias ideales y controladas, es el porcentaje de reducción de una enfermedad en personas que fueron vacunadas con respecto a un grupo que no fue vacunado ( grupo de control).
La efectividad es, la capacidad que tiene la vacuna de proteger contra la enfermedad cuando ya está en el mercado, en la población mundial real, donde las personas podrían, por ejemplo, tener una o más enfermedades, estar distribuidas en un rango de edad más amplio, recibir medicaciones que actúan sobre el sistema inmune, que podrían interferir con la protección de la vacuna.
¿Hay vacunas que son mejores que otras?
Las vacunas tienen diferente porcentaje para prevenir la infección, pero todas tienen porcentaje similar para prevenir hospitalizaciones y enfermedad grave .
Además de eso, las vacunas que se ofrecen actualmente en Guatemala tienen un porcentaje mucho mayor a muchas otras vacunas candidatas que no fueron aprobadas por las instituciones de salud.
La mejor vacuna es la que está disponible para usted.
Beneficios de vacunarse contra COVID-19
1. Ninguna de las vacunas contra el COVID-19 contiene el virus vivo que causa el COVID-19, así que no es posible que una vacuna contra el COVID-19 pueda causar la enfermedad.
2. Las vacunas contra el COVID-19 no son experimentales. Atravesaron todas las etapas requeridas de los ensayos clínicos. Las pruebas y el monitoreo han demostrado que estas vacunas son seguras y efectivas. Además, han sido desarrolladas con base en conocimientos científicos utilizados durante décadas. Las vacunas contra el COVID-19 se han sometido y continuarán siendo sometidas al monitoreo de seguridad.
3. Las vacunas contra el COVID-19 pueden disminuir la posibilidad de que se contraiga y propague el virus que causa el COVID-19.
4. Las vacunas contra el COVID-19 también pueden evitar que se enferme gravemente aunque contraiga el virs de COVID-19.
5. Vacunarse también puede proteger a las personas de alrededor, en especial aquellas con mayor riesgo de enfermarse gravemente a causa del COVID-19.
6. Cuando esté totalmente vacunado contra el COVID-19, puede reanudar muchas de las actividades que hacía antes de la pandemia (Los CDC recomiendan que las personas con esquema completo de vacunación usen mascarilla en entornos públicos cerrados si se encuentran en áreas de transmisión alta).
7. Vacunarse independientemente de que haya tenido COVID-19 proporcionará un fuerte refuerzo de protección. El COVID-19 continúa siendo una amenaza para las personas que no están vacunadas. Algunas personas que contraen COVID-19 pueden enfermarse gravemente, lo que podría provocar su hospitalización, y algunas personas presentan problemas de salud permanentes por varias semanas después de haberse infectado, o incluso por más tiempo. Incluso las personas que no tuvieron síntomas cuando se infectaron pueden experimentar estos problemas de salud permanentes.
¿A partir de qué día se tiene inmunidad después de la vacunación?
Hay evidencia de que se empieza a generar inmunidad dos semanas después de administrada la primera dosis de la vacuna.
Sin embargo, es importante aclarar que, para alcanzar un alto nivel de inmunización (protección) es necesaria la aplicación de la segunda dosis de la vacuna contra el Covid-19. Recuerde que siempre debe continuar con el uso de la mascarilla, el distanciamiento social y lavado frecuente de manos, pese a tener el esquema completo de vacunación.
Inmunidad por vacuna:
Para Pfizer: La inmunización completa parece alcanzarse dos semanas después de la segunda dosis.
Para Moderna: La inmunización completa parece alcanzarse dos semanas después de la segunda dosis.
Para Janssen (una empresa de Johnson & Johnson): tarda aproximadamente cuatro semanas en obtener una protección completa contra el COVID-19 (dos semanas después de la vacunación para la protección contra la enfermedad leve a grave).
¿Si me vacuno, me puedo enfermar de COVID?
Si, puede enfermarse de COVID-19 después de vacunarse.
Sin embargo, el vacunarse protege de contraer la infección a la mayor parte de la gente que se la aplica, además de la vacuna lo protege de desarrollar una enfermedad grave y reduce bastante el riesgo de ser hospitalizado.
Así que aunque exista la posibilidad de enfermedad después de vacunarse, la posibilidad de que desarrolle enfermedad grave o muera es muy baja.
¿Cuánto tiempo dura la inmunidad de la vacuna?
Las vacunas Moderna y Pfizer-BioNTech ofrecen inmunidad contra el COVID-19 durante al menos seis meses.
La inmunidad disminuye a medida que bajan los niveles de anticuerpos, por lo que es probable que se necesiten vacunas anuales y refuerzos para mantener la inmunidad.
Debido a los estudios realizados, puede decirse que las vacunas Johnson & Johnson, Moderna y Pfizer-BioNTech seguirán ofreciendo protección contra muchas variantes conocidas de COVID-19.
¿Si me da COVID debo empezar otra vez mi esquema o sigo con mis dosis?
No es necesario reiniciar el esquema de vacunación si le da COVID-19. Debe ponerse la segunda dosis después de recuperarse de los síntomas. Se recomienda que sea entre 10 días a 1 mes después desde los síntomas iniciales o a partir de cuando dio positivo en una prueba de antígeno o PCR.
Si me dio Covid-19 ¿Cuánto tiempo debo esperar para aplicarme la vacuna?
Una persona que tuvo COVID-19 puede vacunarse una vez que se haya recuperado completamente y haya cumplido con el período de aislamiento recomendado (generalmente entre 7 y 10 días, dependiendo de la normativa local y la gravedad de los síntomas).
En muchos casos, los expertos recomiendan esperar entre 3 y 6 meses desde el inicio de la infección para recibir una dosis de refuerzo, ya que la infección reciente proporciona cierta protección natural. Este intervalo puede ayudar a generar una mejor respuesta inmunológica.
¿Pueden colocarse el mismo día las vacunas de COVID-19 e influenza?
Ambas vacunas (contra la influenza y la COVID-19) se pueden aplicar el mismo día, siempre que se administren en brazos diferentes.
Sin embargo, como ambas pueden causar efectos secundarios leves, como fiebre, cansancio, dolor de cabeza o dolor muscular, lo más recomendable es aplicarse una primero, esperar a que los síntomas desaparezcan, y luego recibir la otra. Este intervalo suele ser de aproximadamente dos semanas.
Tanto la influenza como la COVID-19 son enfermedades respiratorias, pero están causadas por virus distintos. Ambas pueden representar un riesgo serio para la salud, por lo que es importante estar protegido contra las dos.
Dosis, intervalos y refuerzos de vacunas contra COVID-19
Dosificación en el esquema inicial (sujeta a disponibilidad de vacunas):
– Moderna:
2 dosis del mismo producto, de 0.5 ml cada una, separadas por 28 días entre la primera y la segunda dosis.
En niños de 6 a 11 años, la dosis es de 0.25 ml cada una, con un intervalo de 60 días entre ambas (el intervalo de 60 días en niños, se reserva por consideraciones de logística o suministro, el esquema usual es de 28 días).
– Pfizer:
2 dosis del mismo producto, separadas por un intervalo mínimo de 21 días y máximo de 42 días.
Para personas mayores de 12 años, la dosis es de 0.3 ml y se presenta en viales con tapa morada.
Para niños y niñas de 5 a 11 años, la dosis es de 0.2 ml y se presenta en viales con tapa naranja.
En Guatemala, el intervalo de aplicación inicia a partir de los 28 días.
– AstraZeneca:
2 dosis del mismo producto, de 0.5 ml cada una, con un intervalo entre 8 y 12 semanas, pudiendo extenderse hasta 16 semanas.
– Sputnik V:
2 dosis de productos distintos, de 0.5 ml cada una, separadas por un intervalo mínimo de 21 días y máximo de 180 días.
La primera dosis se presenta en un vial con tapa roja, y la segunda, en un vial con tapa azul.
En Guatemala, el intervalo de aplicación inicia a los 28 días.
Dosis de refuerzo (sujetas a disponibilidad de vacunas):
Primer refuerzo (3ª dosis):
– Pfizer: A partir de los 12 años, se aplica 4 meses después de la segunda dosis.
– Moderna: A partir de los 18 años, se aplica 4 meses después de la segunda dosis.
Segundo refuerzo (4ª dosis):
– Moderna: 0.25 ml, para todas las personas a partir de los 12 años.
– Pfizer: 0.3 ml, para todas las personas a partir de los 12 años.
¿Cuánto tiempo después puedo ponerme el refuerzo si me dio COVID-19?
Si dio positivo por COVID-19, se recomienda esperar 15 días. Espere hasta que termine de aislar (10 días para personas con o sin síntomas) y espere hasta que no tenga ningún síntoma (5 días sin síntomas).
Lo más recomendable es que analice cómo se siente y espere a estar totalmente recuperada de los síntomas. Su sistema inmune debe “tomar un descanso” después de sufrir la enfermedad.
Recomendaciones para esquemas de vacunación con vacuna de diferente marca y refuerzos según el MSPAS
El Consejo Nacional de Prácticas de Inmunizaciones (CONAPI) emitió la actualización sobre las recomendaciones para la vacunación con esquemas primarios de vacunación heterólogos (Primera y Segunda dosis de diferente marca).
El Ministerio de Salud (MSPAS) implementó las siguientes opciones de vacunación, según la disponibilidad en centros de salud.
¿Quiénes pueden aplicarse dosis de refuerzo?
La dosis de refuerzo está disponible para todas la personas que tienen el esquema completo (dos dosis de Moderna, Pfizer, AstraZeneca o Sputnik o una dosis de Johnson&Johnson).
El refuerzo pueden aplicárselo todas las personas que tengan 12 años o más.
Requisitos:
Vacuna actualizada como refuerzo (4ta dosis)
Vacuna Moderna 2024: Spikevax KP.2
En 2024, Moderna actualizó su vacuna contra COVID-19 para adaptarla a las variantes más recientes del virus, en especial la subvariante KP.2 del linaje Ómicron. Esta nueva fórmula, conocida como Spikevax KP.2, es monovalentey fue autorizada por la FDA en agosto de 2024.
Esquema de administración (según disponibilidad de vacunas):
Niños de 5 a 11 años:
– Si nunca han sido vacunados: 2 dosis, con 1 mes de diferencia.
– Si ya recibieron una dosis: completar esquema con una dosis adicional.
– Si ya tienen esquema completo: 1 refuerzo, al menos 2 meses después.
Personas de 12 años en adelante: 1 dosis de refuerzo, al menos 2 meses después de la última vacuna.
Vacuna Moderna 2025: mNEXSPIKE
En mayo de 2025, la FDA aprobó una nueva generación de la vacuna de Moderna, llamada mNEXSPIKE, diseñada específicamente para brindar protección prolongada con una dosis más baja que las fórmulas anteriores.
Esta vacuna está indicada únicamente para:
– Personas de 65 años o más.
– Personas de 12 a 64 años con enfermedades crónicas o condiciones que aumentan el riesgo de complicaciones por COVID-19.
Características destacadas:
– Se administra en una sola dosis como refuerzo.
– Utiliza solo el 20 % de la dosis original de Spikevax, con igual o mejor eficacia.
– Tiene mayor estabilidad: puede mantenerse en refrigeración estándar, facilitando su distribución y uso en clínicas y farmacias.
Los estudios clínicos demostraron que mNEXSPIKE es segura, bien tolerada y eficaz en prevenir formas graves de la enfermedad.
¿Es segura la vacuna de refuerzo actualizada contra el COVID-19?
Las personas pueden estar seguros de que la FDA ha tenido mucho cuidado en asegurar que estas vacunas nuevas contra el COVID-19 cumplen con rigurosas normas de seguridad, eficacia y calidad de fabricación para la autorización de uso.
Los eventos de salud posteriores más frecuentes fueron dolor, enrojecimiento e hinchazón en el lugar de la inyección, fatiga (cansancio), dolor de cabeza, dolor muscular, dolor en las articulaciones, escalofríos, hinchazón de los ganglios linfáticos en el mismo brazo de la inyección, náuseas/vómitos y fiebre, para la vacuna de Moderna.
¿Debería ponerme el refuerzo actualizado si ya tuve COVID-19?
Si es recomendable que las personas que hayan tenido COVID-19 se vacunen. Pero deben esperar hasta que se hayan recuperado por completo de los síntomas y estén fuera del aislamiento.
El CDC recomienda esperar al menos tres meses después de una infección por COVID-19 para recibir el refuerzo.
¿Dónde se descarga la constancia de vacunación en línea?
En caso de no contar con el carnet de vacunación que se entrega al momento de la vacunación, una constancia electrónica puede descargarse del sitio web del Programa Nacional de vacunación.
Únicamente se necesita número de DPI (CUI o pasaporte) y fecha de nacimiento.
https://registrovacunacovid.mspas.gob.gt/mspas/citas/consulta
¿Cuáles son las reacciones normales después de vacunarse contra COVID-19?
Algunos eventos de salud posteriores leves o moderados que podría sentir después de recibir la vacuna son:
– En la zona del brazo: dolor, enrojecimiento e hinchazón.
– En el resto del cuerpo: cansancio, dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos, fiebre, náuseas y diarrea.
Si alguno de los síntomas persiste durante más de unos días o si sufre una reacción más grave, debe ponerse en contacto con un médico lo antes posible.
Si desarrolla una reacción alérgica dentro de las cuatro horas después de recibir la vacuna debe de contactar al médico inmediatamente.
¿Cuáles son los eventos de salud posteriores del refuerzo contra COVID-19?
Refuerzo de Pfizer:
Según los datos de ensayos clínicos recopilados por Pfizer-BioNTech, los eventos de salud posteriores más comunes después de la inyección de refuerzo fueron:
– Dolor en el lugar de la inyección
– Fatiga
– Dolor de cabeza
– Dolor muscular
– Escalofríos
Refuerzo de Moderna:
Según los datos de ensayos clínicos recopilados por Moderna, los eventos de salud posteriores más comunes después de la inyección de refuerzo fueron:
– Dolor en el lugar de la inyección
– Fatiga
– Dolor de cabeza
– Dolor muscular
– Dolor en las articulaciones
Refuerzo de AstraZeneca:
Según los datos de ensayos clínicos recopilados por AstraZeneca y Universidad de Oxford los eventos de salud posteriores más comunes después de la inyección de refuerzo fueron:
– Dolor muscular
– Energía baja
– Dolor de cabeza
– Un sentimiento de malestar general
– Dolor en el lugar de la inyección
Refuerzo de Sputnik:
– Enfermedad similar a la gripe
– Dolor de cabeza
– Fatiga
– Dolor en el lugar de la inyección
¿La vacuna puede dar efectos similares a COVID-19?
Es completamente normal tener eventos de salud posteriores o síntomas después de ponerse la vacuna contra el COVID-19 y suceden porque el cuerpo está formando defensas en contra del virus. Los síntomas son leves y algunos son parecidos a los que causa el COVID-19.
Algunas personas podrían no sentir ningún síntoma, y esto es normal, no significa que la vacuna no haya funcionado.
Los siguientes síntomas no se deben a la vacuna COVID-19: Tos, Dolor de Garganta, Mocos, Congestión nasal. Esto puede deberse a que la persona se contagió con COVID-19 unos días antes de colocarse la vacuna y por lo tanto es recomendable aislarse y hacerse prueba de COVID-19.
¿Cuánto suelen durar los eventos de salud posteriores de la vacuna?
El tiempo usual que duran los eventos de salud posteriores de las vacunas de COVID-19 es de 24 a 72 horas.
Luego de este tiempo, los síntomas deberían disminuir por sí solos. Si no disminuyen, es importante contactar a un médico.
Los síntomas inician después de la inyección de la vacuna de COVID-19, no pueden iniciar una semana después.
Referencias